Las bibliotecas personales habilitan e implican redes de prácticas, saberes, sociabilidades, vinculaciones, sentidos particulares. Sin embargo, y a pesar de su significatividad en términos sociales y culturales, en tanto forman parte de la vida cotidiana de los lectores y de otros actores ligados a la “cultura del libro” (y muchas veces parte fundamental, determinante, en el sentido más profundo de la gestión de una vida), estas variables no son un objeto de estudio distinguible desde el campo académico.
Esta ponencia busca presentar resultados parciales de una investigación doctoral en curso, en donde se intenta comprender a las bibliotecas personales, a su materialidad real, sus características espaciales, a partir de los discursos de sus propietarios, de “lectores” de la región, de las redes de vinculaciones, de prácticas y de sentidos que se traman y se re-crean en torno a ellas.
Algunas preguntas que guían esta investigación, de la que se busca ofrecer una introducción y un marco general en esta ponencia: ¿qué es/puede ser una "biblioteca personal" hoy? ¿de qué se compone? ¿cuáles son sus límites? ¿Cómo juegan en su conformación la selección, la intención, la práctica de lectura, el apego/desapego, la marca personal del “propietario”? ¿Cómo se conforman las redes de vinculación y la sensibilidad contemporánea de los lectores/propietarios con relación a sus bibliotecas personales? ¿Pueden rastrearse regularidades, escenarios, saberes, técnicas y prácticas, dispositivos, actividades, sensibilidades colectivas, compartidas por/entre los distintos propietarios, relacionadas con las bibliotecas personales? (o, más simple: ¿qué hay de colectivo en lo que se teje en el “mundo de las bibliotecas personales”? ¿qué marcas de lo colectivo pueden rastrearse y describirse en una biblioteca personal?).